Tritura las galletas en una batidora hasta obtener migas. Mezcla las migas de galletas con la mantequilla derretida. Luego echa esta masa en un molde para pastel y ponlo en la nevera.
Mientras tanto, en un bol mezcla el mascarpone, Philadelphia y el azúcar glas hasta obtener una textura cremosa.
Extiende esta mezcla sobre la base de galletas y déjala al menos 2 horas en la nevera.