Preparación:
40 min
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Cocción:
15 min
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Tiempo total
55 min
Mezcla la harina con 100 g de pipas, la levadura, una cucharadita de azúcar, la sal, el aceite y 250 ml de agua templada hasta conseguir una pasta homogénea. Déjala reposar en un lugar templado durante unos 10 minutos aproximadamente.
Una vez haya pasado el tiempo, echa un poco de harina sobre la superficie de trabajo. Trabájala un poco y extiéndela hasta lograr un grosor de 2 cm y recorta 12 círculos de unos 8 cm de diámetro. Puedes ayudarte de la beca de un vaso para que te queden de igual tamaño.
Pon papel vegetal sobre una bandeja de horno y colócalos encima. Píntalos con la yema batida y agrega las pipas restantes por encima. Tapa la bandeja y mantenla en un lugar templado hasta que los panecillos suban.
Precalienta el horno a 200º C (si es con ventilador a 180º C) y hornea los panecillos durante 15 minutos.
Mezcla el quark con la leche y el resto del azúcar. Cuando los panecillos estén fríos, córtalos por la mitad y agrégales la crema de queso quark y la mermelada al gusto.