Preparación:
15 min
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Cocción:
5 min
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Tiempo total
20 min
Vierte la levadura fresca en un bol pequeño, agrega un poco de agua tibia y el azúcar. Mezcla bien para disolver todos los ingredientes y agrega la mezcla a las dos harinas que has tamizado en un tazón grande.
Amasa con la punta de los dedos. En el agua tibia restante, disuelve la sal y agrega el aceite. Vierte el agua con la sal y el aceite sobre la harina y amasa bien.
Continúa trabajando la masa sobre una superficie plana. Deja reposar la masa de pita en un recipiente engrasado y cubre con un paño húmedo. Luego pon el recipiente en el horno apagado con la luz encendida durante 2 horas. Cuando la masa haya duplicado su volumen, divídela en 8 partes y forma unas bolitas.
Con un rodillo extiende las bolitas. Coloca el pan pita en una bandeja forrada con papel de horno y cepíllalas con aceite y agua.
Deja crecer el pan pita casero durante al menos 40 minutos, en el horno apagado pero con la luz encendida. Una vez que termine la levadura, espolvorea nuevamente con agua y hornea a 250° C durante 5 minutos. Sirve el pan pita casero.